Durante la época de verano, Menorca es una de los destinos turísticos por excelencia para todos aquellos que quieran disfrutar de paradisiacas playas y calma absoluta. Es por ello pues, que el número de visitantes en las playas y el número de embarcaciones de recreo se ve altamente incrementado. Hasta aquí todo está bien. Somos afortunados de vivir en la isla de Menorca y nos gusta compartirla con todos aquellos que quieran conocerla.
Los problemas vienen cuando algunas de las personas, residentes o visitantes, no saben cuidar de nuestra hermosa casa. Dejar toda la basura generada después de un día de playa es más frecuente de lo que nos gustaría. Encontrar enormes cantidades de plástico en la orilla del mar, es otro de los motivos por los cuales, Menorca necesita que la respetemos. Que no la ensuciemos y si lo está, entre todos, la limpiemos.
Si vas a la playa, recoge todas tus pertenencias, todas.
Cuando alguien va a la playa, normalmente clava la sombrilla, estira la toalla y en oacasiones, saca las palas y los flotadores. De esta forma puede pasar un día de playa de lo más cómodo y divertido. Sacar la botella de agua, pelar la fruta fresca y abrir la bolsa de patatas fritas con una lata de un refresco, hace que el momento sea todavía más perfecto.
Después de un maravilloso día, llega el momento de recoger las pertenencias. Plegamos la sombrilla, sacudimos la toalla, lavamos bien las palas y desinchamos el flotador. Guardamos todo en la bolsa de playa y ponemos rumbo al coche. De camino al coche, vamos comentado lo bien que nos lo hemos pasado y lo bonito que es Menorca. Dejando atrás, la botella de agua de plástico vacía, restos de fruta, la bolsa de patatas fritas y la lata del reresco. Por desgracia esta acción es repetida demasiadas veces durante el día en muchos puntos de Menorca y entre todos debemos conseguir que esto no pase.
A todos nos encanta llegar a una playa y verla limpia, es por ello que una vez hayamos disfrutado de ella, debemos dejarla tal y como nos la encontramos. Recogiendo todas nuestras pertenencias, tanto los objetos necesarios para pasar este fantástico día de playa, como la basura que hemos generado durante el día. Esto último, también forma parte de nuestras pertenencias y por tanto debemos llevarnos lo con nosotros. Si es para tirar, lo debemos depositar en la próxima basura que encontremos pero nunca dejarlo en la playa.
Consecuencias de dejar la basura en la playa
La contaminación del mar produce daños tanto en la economia, como en la salud y la biodiversidad.
Una playa sucia es menos apetecible, crea rechazo hacia aquellos que tienen la expectativa de llegar a una playa ídilica y por lo tanto el número de visitantes se verá reducido. Además como más sucia se encuentre la playa, más esfuerzos se deberán destinar a la limpieza y no se podrán utilizar para otros proyectos.
En cuanto a términos de salud, la contaminación que genera una playa sucia afecta a las personas y a los animales. Los plásticos tienen toxinas DDT, BPA y otros pesticidas que se adhieren a pequeñas partículas que pueden ser ingeridas por bañistas o animales.
Una de las consecuencias más graves de ensuciar la playa o dejar basura en ella es la pérdida de la biodiversidad. La ingesta de basura por parte de las diferentes especies, genera un serio problema e impiede el correcto flujo en la vida de los animales del mar. Muchas especies están expuestas por el impacto que generan los desechos de plástico en su organismo.
La solución está en nuestras manos.
Los principales responsables de esta inmensa basura que acabe en los mares, somos únicamente los humanos. Es por ello, que debemos cuidar todo nuestra entorno y respetarlo al máximo.
Si vienes a Menorca, seguramente visitarás sus playas y es muy probable que acabes generando algún tipo de deshecho, especialmente de plástico. No hay problema, siempre y cuando seas los suficientemente humano para llevartelo contigo en el momento de irte y depositarlo en el contenedor correspondiente.
En Menorca es muy frecuente encontrarte bañista que aprovechan un rato de su día de playa para recoger basura generada por otros visitantes. De esta forma colaboran con el mantenimiento de una playa más apetecible para todos y un medioambiente menos contaminado.